sábado, 18 de abril de 2009

ROBANDO ESPACIO


¿¡Que!?

¿¡Sábado ya!?

¡Oh! Santo dios de los ateos.

Hace cuatro meses compre un calendario… tres días después lo perdí…

…Ese fue el último día que supe que día estábamos viviendo.

Hoy desperté alrededor de las 2 de la tarde y me di cuenta de que tenía el cabello pegado en mi cara por culpa del sudor, después de quitar esos mechones que obstruían mi vista me quede parada al borde de mi cama pensando en esta escena… yo, con el cabello hecho un nido de gallina, los ojos hinchados y las sabanas amenazando con no dejarme libre, simplemente parada haciendo absolutamente nada con la mirada perdida, cualquiera que entrara de repente creería que soy sonámbula (si no pasara del medio día, claro). “Que rara debo verme” pensé en cuanto regrese de mi coma, y luego recordé que no era la primera vez que sucedía esto de desconectarse recién despertando, ahí fue cuando el deja’ vu ataco… casi… algo es diferente….

… ¡OH CLARO!... ¡afuera la ciudad se quema!

La última vez que mi cerebro decidió desobedecer a mi cuerpo y seguir durmiendo por su propia cuenta fue en diciembre, abrí los ojos, me levante, desenrede las sabanas de mis piernas y me pare con la vista hacia la ventana… (5…4…3…2…1…¡¡¡ puff!!! ¡Despeguen! Andy esta en la luna ahora). Aterrizando y ya de vuelta en la Tierra me acerque a la ventana, el día era nublado y algo gris; bien podrían ser las 8 de la mañana o las 5 de la tarde, uno cuando duerme mucho se desorienta y en invierno siempre es gris, excepto de noche.

Esa era la diferencia, hoy, el acercarse a la ventana era como abrir la puerta del horno y el reflejo del sol en la calle era demasiado brillante como para equivocarse de hora; parpadee una, dos, tres veces…. “no, pos ya llego primavera…”. Acepto que cuando despierto no soy la persona mas lista y mas atenta del mundo, la cosa esta en cada cuando despierto.

¿¡Ya llego la primavera!? ¿¡Que!? ¿¡Tan rápido!? ¿¡Pues que fecha es!? ¿¡Sábado ya!?

¡Oh! Santo dios de los ateos, el lunes hay clases, las vacaciones pasaron y yo ni siquiera recuerdo el ultimo día de clases, siento que he dormido durante los últimos meses y ni siquiera recuerdo como llegamos a la primavera.

Es gracioso como el tiempo se va, solo, desaparece, como si jamás hubiera sucedido, lo único que nos queda como prueba de que el invierno no fue una ilusión son fotografías, los recuerdos no son confiables, la gente que sueña despierta puede confundir las memorias con alguna de sus fantasías. Los últimos años han sido tan diferentes y tan iguales; he conocido gente, he olvidado gente también, he crecido, he madurado, me he vuelto mas infantil que nunca, me he enamorado y convertido en la persona mas rosa del planeta, he odiado y sentido celos, he hecho de la promiscuidad una forma inocente te vida así como me he vuelto religiosa y decidido que no hay nada mejor que la tranquilidad del celibato; he leído algunos libros y quemado otros ; el mundo ha cambiado, gente ha muerto, gente ha nacido, evolucionado, llorado, reído… todo cambia, las cosas vienen de la misma forma en que se van, y se van tan rápido, que ni cuenta te das; un día despiertas y te das cuenta de que por mas que sientas que llevas corriendo toda tu vida, no te has movido de tu sitio ni un centímetro, sigues siendo la misma persona que eras cuando tenias siete años, con los mismos miedos y las mismas obsesiones y te sigues perdiendo en tus pensamientos al pie de tu cama mientras el mundo gira y cambia.

El tiempo es subjetivo...

Creo que necesito dormir, realmente dormir, y tal vez, despertare en un futuro en donde las maquinas del tiempo estén como las maquinas de refrescos en las plazas comerciales, y pueda regresar para saber que me perdí todo este tiempo mientras soñaba despierta.